Con miras a mejorar la salud de usuarias y usuarios con patologías que forman parte del Programa de Salud Cardiovascular (PSCV), kinesiólogos de los CESFAM de nuestra red de atención primaria fueron capacitados en ejercicio físico, y su prescripción como herramienta terapéutica en estos casos.

Los profesionales recibieron conocimientos sobre cómo el ejercicio físico puede mejorar los índices de compensación de pacientes con enfermedades muy comunes, como hipertensión, diabetes, sobrepeso y obesidad, entre otras patologías relacionadas al sistema cardiovascular.

Timoteo Cid, Referente Técnico Ciclo Vital Adulto Programa Cardiovascular, señala que “la Dirección de Atención Primaria está generando una fórmula para incorporar la prescripción del ejercicio físico por parte de kinesiólogos, como abordaje clínico en la APS. Siempre teniendo presente que el ejercicio físico es bueno, pero es mejor y más seguro cuando es bien asesorado por un profesional capacitado. Queremos incorporar la herramienta de prescripción del ejercicio físico, dentro del Programa de Salud Cardiovascular, para mejorar las condiciones clínicas de los usuarios y usuarias, impactando notablemente en su calidad de vida, su salud mental, y como consecuencia, proyectar una mejor y más prolongada vida”, afirma.

Cid, manifiesta que la evidencia respalda contundentemente el beneficio de la prescripción de actividad física y ejercicio en pacientes con patologías cardiovasculares, tanto como herramienta terapéutica de tratamiento no farmacológico, como herramienta de prevención de eventos cardiovasculares.

Sebastián Martínez, kinesiólogo del CESFAM N°5 y uno de los participantes en la capacitación, manifiesta que “fue sin duda un gran aporte, ya que se plantea en primera instancia como una unificación de criterios para la implementación y/o fortalecimiento de la estrategia de ejercicio físico como herramienta terapéutica. Se enfocó principalmente en usuarios del Programa Cardiovascular, quienes generalmente tienen multimorbilidad como hipertensión arterial, diabetes, dislipidemia, enfermedad renal, entre otras. Por lo cual, son pacientes que se encuentran intervenidos desde la farmacología. Por ello resulta de gran valor contar con esta herramienta no farmacológica para su tratamiento, y lograr un impacto positivo en la vida diaria del usuario”.

Las enfermedades cardiovasculares, son un conjunto de enfermedades que afectan el corazón y a los vasos sanguíneos, entre ellas las enfermedades cerebrovasculares, cardiopatías y arritmias, entre otras.

La mortalidad por enfermedades del sistema circulatorio en personas de 15 años y más, y la mortalidad prematura, entendida en personas entre 30 y 69 años, han disminuido a nivel nacional entre los años 2009 a 2018. Sin embargo, sigue siendo una causa importante de muerte. Un ejemplo de ello es que, durante el año 2019, las enfermedades cardiovasculares representaron la cuarta parte de las muertes en Chile.

Dos enfermedades cardiovasculares ocupan el primer y segundo lugar de las causas de muerte en Chile el año 2019, siendo éstas el infarto agudo al miocardio (IAM) y el ataque cerebrovascular (ACV), respectivamente.