El seguimiento a los funcionarios contagiados considera una encuesta telefónica personalizada, evaluaciones presenciales o telemáticas, así como la entrega de apoyo vía correo electrónico o telefónico con tutoriales de ejercicios para los distintos tipos de pacientes.

El Servicio de Medicina Física y Rehabilitación de la Posta Central, en conjunto con la Unidad de Salud del Trabajador, son las dos instancias a cargo del seguimiento telefónico de todos los funcionarios del hospital que fueron afectados por COVID-19 para evaluar su condición de salud, específicamente el estado funcional.

Hasta la fecha, 406 personas han sido contactadas y con la información entregada se van a generar perfiles de intervención que van desde educación hasta la evaluación presencial o a distancia por un fisiatra. Además, se van a entregar instrucciones por correo electrónico y videos con tutoriales de ejercicios que van apoyar la rehabilitación física.

La coordinadora del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación, Joana Molina, señaló que esto nace de la necesidad de ayudar a los funcionarios contagiados con COVID-19. “Esta enfermedad produce deterioro de las capacidades motoras básicas, y con esto se busca aportar a que cada uno en sus casas trate de recuperar su estado físico inicial”, dijo la profesional, agregando que “los pacientes quedan con debilidad muscular, con disnea, pierden fuerzas, les cuesta subir escalas, y con esto se busca aportar en la recuperación de los funcionarios para que se reincorporen al trabajo de la mejor forma”.

En ese sentido, la doctora Estefanía Guajardo, jefa de la UST, afirmó que el programa “está diseñado especialmente para acompañar y mejorar el área motora/funcional y de salud mental de los funcionarios HUAP. El equipo del programa evalúa las necesidades de cada funcionario y dispone de atenciones presenciales, video llamadas o videos educativos de ejercicios”.