Salud Mental Materna: el trabajo de la Red del SSMC en medio de la actual pandemia
Durante la primera semana de mayo se concientiza a nivel mundial sobre la importancia de prevenir, detectar y tratar los problemas de salud mental en mujeres en proceso de gestación y posparto. Esto adquiere mayor relevancia en la actual alerta sanitaria y ha llevado a nuestra red de atención a adoptar medidas en beneficio de las usuarias.
Desde el año 2016, el primer miércoles de mayo se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental Maternal. El objetivo es concientizar y sensibilizar sobre los problemas de salud mental perinatal, y sobre la importancia de mejorar la prevención, detección y tratamiento de trastornos mentales durante el embarazo y el primer año posterior al nacimiento. En definitiva, disponer de manera más efectiva de dispositivos que le permitan a la mujer buscar ayuda.
De acuerdo a estadísticas, cerca de un 10% de las mujeres presentan depresión o ansiedad durante el posparto, lo que lo convierte en un problema de salud de gran relevancia.
La enfermedad mental materna puede además afectar directamente al feto y al recién nacido en su desarrollo físico, cognitivo y emocional. En cambio, la atención hacia la salud mental de la madre le permite adaptarse mejor y vincularse afectivamente con su bebé. Por eso, cuidar la salud mental de las madres supone mejorar la salud de la sociedad actual y futura, y debe ser un desafío que comprometa a la sociedad en su conjunto.
En un escenario como el de la actual alerta sanitaria por COVID-19, esto puede verse exacerbado. La salud mental de una mujer gestante o en condición de posparto puede también verse afectada por problemas laborales y económicos, por la soledad, el miedo ante el riesgo de la propia salud o la de su bebé, e incluso problemas familiares o de violencia doméstica, que aumentan en este tipo de contingencias.
Trabajo en la Red SSMC
En este contexto, la red SSMC ha implementado medidas para adecuar sus atenciones, a los resguardos requeridos en el contexto de la pandemia, pero sin descuidar el acompañamiento requerido por las usuarias en período de embarazo o posparto.
Entre ellas, las prestaciones prenatales en la Atención Primaria están siendo priorizadas, focalizadas en los ingresos a control prenatal, segundo y tercer trimestre y consultas por morbilidad. En lo que respecta a oferta de salud mental, se está priorizando la atención de gestantes de mayor riesgo, cuyos seguimientos se están realizando vía telefónica, y existe coordinación con el hospital respectivo en los casos más complejos.
En tanto, los controles a la madre y el bebé se están realizando, en algunos casos, a domicilio dependiendo de las condiciones y del personal disponible.
A nivel hospitalario, tanto el Hospital Clínico San Borja Arriarán (HCSBA) como el Hospital El Carmen (HEC) de Maipú, han reestructurado sus flujos y atenciones en esta área, tanto en sus servicios de urgencia, preparto, parto y post parto, siguiendo los lineamientos ministeriales y su propia realidad local. Asimismo, existe coordinación de la red para hacer seguimiento de las altas médicas.
En el HCSBA el acompañamiento en el parto se encuentra restringido a casos especiales, y las visitas se han ajustado, con controles de seguridad como toma de temperatura. También se ha implementado un acercamiento a los padres, por vía telefónica y correo electrónico, con el envío de fotografías, videos y de toda la información del parto. En el caso del HEC, en tanto, se ha mantenido el acompañamiento salvo en casos en que se detecte sospecha, mientras que las visitas se encuentran suspendidas. Además, disponen también de un correo electrónico, para responder dudas que las usuarias requieran hacer sobre su proceso de gestación: maternidadresponde@gmail.com
La contingencia actual ha incluido también la pesquisa de embarazadas que sean casos confirmados de COVID-19, resguardando su adecuado manejo coordinado. La Red del SSMC ha registrado un total de 11 gestantes confirmadas, pesquisadas entre el 20 de abril y el 4 de mayo, además de una madre en posparto, caso en que se aplicó adecuadamente el protocolo interno hospitalario. El recién nacido arrojó resultado negativo en el examen, y ambos se encuentran actualmente en su casa, con control planificado con el equipo de su CESFAM de origen.